El hijo secreto del príncipe
El príncipe Rule había viajado a Estados Unidos por un asunto familiar de verdadera importancia. Y no se iba a ir hasta que conociera a Sydney O’Shea, la madre de su hijo. Rule no esperaba que la abogada de Texas lo volviera loco de deseo, pero la ley de Montedoro lo obligaba a casarse antes de los treinta y tres años si no quería perder su herencia y su título. La solución perfecta sería casarse con Sydney. Ya tendría tiempo, después, de decirle toda la verdad. Si es que se la decía.
Matrimonio real
El frío y distante Alexander Bravo-Calabretti era el último hombre con el que la princesa Liliana de Alagonia habría querido casarse. Pero, después de un encuentro apasionado, se dio cuenta de que estaba embarazada y sus familias solo iban a aceptar una solución: una boda secreta.
Alex había accedido a casarse con Lili por el bien del bebé; no había otra opción cuando estaban en juego el futuro del trono de Alagonia y el honor de los príncipes. Pero, poco después, cuando representaba el papel de recién casado feliz, se dio cuenta de que deseaba que aquello pudiera ser real.